mayo 22, 2008

El plagio de los Tontiplosters y el otro juicio perdido

Preocupa, y mucho, que Radiotelevisión Española, como si no tuviera suficientes problemas, pueda ser objeto de una brutal querella judicial por parte de un colectivo formado por diveros espertos del mistherio, como Íker Jiménez, J.J. Benítez y, claro, Bruno Cardeñosa, el amo de las conspiranoias y fallido testigo en favor de los terroristas asesinos del 11-M.

Pero ese ataque judicial puede ocurrir en cualquier momento, y para que no digan que miento, dejo aquí para los lectores de este blog la prueba decisiva, la evidencia suficiente del plagio de TVE de las características clave de los rarólogos hispanos: los irresponsables de "Muchachada Nui" fusilándose despiadadamente el estilo de los arriba mencionados. En defensa de los ofensores vale señalar que cuando menos tienen más credibilidad y seriedad que los millonarios cuentacuentos plagiados, aunque tengan menos plata para la producción y las "reconstrucciones" ajoconantes.



Carne de tribunales, pues. Y más ahora que, por cierto (se nos había pasado mencionarlo porque en realidad importa un rábano), Pedro Amorós Sogorb, el hombre con más títulos del sistema solar y sus pintorescos alrededores, presidente eterno de la pandilluca de despistados conocida como "SEIP" (que en realidad no se llama así y que no hace mucho juraba tener a "los mejores parapsicólogos del mundo", juá juá) ha perdido miserablemente el recurso que interpuso contra el fallo de la jueza contra el enchalecado chupapipas en su memorable querella conocida como la "parademanda a la pimienta verde" jaleado por Bruno Cardeñosa, quien aseguró que tal despropósito destinado a quitarle el tiempo a los tribunales de cosas importantes sería algo así como "el fin del escepticismo organizado en España", cuando en realidad desorganizados también damos buena lata. Total, que el heredero de "La Rosa de los Vientos" e historiador súbito sigue sin tener ni idea de temas judiciales, ni de muchas otras cosas, como recordarán los pocos que por alguna extraña causa no han olvidado del todo al supercutre Amorós, a su tropa de cazafantasmas y a su Pepito Grillo Cardeñosa Chao que ahora que tiene fuentes de ingresos más gordas, parece haberlo abandonado.